sábado, 20 de marzo de 2010

Culpables


No hablemos de amor ahora,
porque no tiene sentido,
tu tienes a tu marido,
y yo tengo a mi señora.

Vivamos nuestro momento,
derrochando sensaciones,
dejemos las emociones,
porque serán un tormento.

La culpa es porque gozamos,
sin haber jugado limpio,
puede ser un mal principio,
pero los dos disfrutamos.

De tu sexo he disfrutado,
pues tu cuerpo me sedujo,
tu, te entregaste a mi influjo,
y siento que lo has gozado.

Acá, no hay ninguna ciencia,
disfrutemos de esta noche,
mañana vendrá el reproche,
de nuestra propia conciencia.

Si no volvemos a vernos,
sobre la piel llevaremos,
toda la miel que logremos,
o las culpas de ofrecernos.


miércoles, 17 de marzo de 2010

De penas

Con un mechón de cabello,
ella tejiose un collar,
con varias conchas de mar
y colgóselo a su cuello.

Adornaba su cabeza
una corona de flores,
flores de varios colores,
que exaltaban su belleza.

De blanco ella se vistió
y caminó hacia la orilla,
se quitó una zapatilla
y con su pie escribió.

Dicen que ella lloraba
adentrándose en el agua,
una ola alzó su enagua
y la otra, la devoraba.

Aquellos que la vieron
intentaron rescatarla,
mas no pudieron hallarla,
por mucho que insistieron

Unos cuentan que una estrella
bajó del cielo a buscarla,
otros dicen que al mirarla,
un delfín vino por ella.

Las olas jamás borraron
el poema que escribiera
con su pie en la rivera
y por años lo recitaron.

Hablaba de una promesa,
un amor y un hasta luego,
la metáfora de un ruego,
del dolor y la tristeza.

martes, 16 de marzo de 2010

Que se detenga el tiempo



Tamaña la luna sobre los pinos
pintó tu mirada con dos luceros
llevándome el alma por los senderos
que unen a fuego nuestros destinos

Déjame mirarme en tus ojos brujos
deseo embriagarme con tu mirada
besarte la boca como granada
y amarte en la arena sin más tapujos

El cielo ha colgado con gran derroche
millares de estrellas para nosotros,
hagamos el amor como dos potros
bajo el amparo de esta nuestra noche

Tersa es tu piel, cual pétalo de rosa
libo la miel que brota de tu boca
ardiente tu vientre, clama y provoca,
beber de tu copa, dulce y fogosa

Detén el tiempo, ¡OH Dios!, te lo pido
no quiero que acabe esta noche de amor
si ella se acaba yo tengo el temor,
que nuestra pasión, se vista de olvido

martes, 9 de marzo de 2010

Mi vida




Subido a éste tren que jamás se detiene,
observo el camino, pasar y pasar,
el vidrio empañado me impide mirar,
aquellos colores que se que ella tiene.

Mi fiel compañera sentada a mi vera
provoca mi llanto, debido a mi suerte,
tan fría y callada como la misma muerte
me grita que fue, mi jovial primavera.

Es la soledad que se ha unido a mi vida,
como una condena, como maldición,
el tren continúa, no tiene estación,
y mi desencanto no tiene medida.

Si entorno los ojos aún veo el ayer,
detrás de la niebla distingo un paisaje,
que yo disfrutaba iniciando este viaje,
pero allí existen cosas que no quiero ver.

Entonces insisto en mirar hacia afuera,
veo entre la niebla, la vida pasar,
y yo aquí sumido, en constante pesar,
hoy ya ni recuerdo, quien soy ni quien fuera.

sábado, 27 de febrero de 2010

Sobre la duna


Cómplice esconde la luna,
tras una nube su faz,
para dejarlos en paz,
besarse sobre una duna.

El mar corea un rumor,
al recostarse en la arena,
el canto de una ballena,
y el murmullo del amor.

Son paisaje y sinfonía,
que los duendes de la noche,
compusieron con derroche,
de celestial sintonía.

Caricias que con premura,
recorren toda la piel,
buscando obtener la miel,
que promete la ternura.

Los dos buscan al instante,
saciar la sed que provoca,
la comunión de una boca,
en la boca de su amante.

Pasión, lujuria y sudor,
ambos parecen fundidos,
como náufragos hundidos,
en los mares del amor.

La flama crece y apura
y entre suspiro y gemido,
el licor, es al fin bebido,
para alcanzar la cordura.

De nuevo sale la luna,
el mar sigue murmurando,
ellos se están arrullando,
allá en la arena, sobre la duna.

Cosas que pasan.




La vida tiene esas cosas,
hasta a veces sin sentido,
un cigarrillo encendido,
unas miradas jocosas,
y hablamos de tantas cosas,
que ni siquiera recuerdo,
normalmente yo no muerdo
pero si tu no me acosas,
pero dejando de lado
las aburridas rutinas,
descorriendo las cortinas
para ver si está nublado,
los minutos y las horas,
pasaron sin darme cuenta,
y entonces uno lamenta
el tiempo que no atesora.

Lo cierto es, que mi mano
jugaba bajo tu blusa
entre copas, luz difusa,
y un sentimiento profano
me desperté a la mañana
enredado en tus cabellos,
y los recuerdos tan bellos
de una noche soberana,
Me levanté de tu lecho,
pero mientras me duchaba,
muy preocupado pensaba,
la locura que había hecho.
un taxi puedo coger
para llegar al trabajo,
preguntándome por lo bajo
¿Que le digo a mi mujer...?
                                                                                 
                                                                                         De Julio Madriaga

Facebook | Julio Madriaga

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martes, 23 de febrero de 2010

Una sirena


Allá sobre la cresta de una ola,
se asoma insolente una sirena
las olas forcejeaban con la arena,
impulsadas con embates de su cola.

Me mira, se sonríe y se sumerge,
pasmado, quedé sobre esa roca,
me dije ¡¡Al Diablo con la foca!
y a mi lado, de pronto ella emerge

Cubierto de espuma su cabello,
sus ojos, cual perlas relucientes,
azules, sus labios y sus dientes,
conchas y corales en su cuello

¿Quién eres? preguntó interesada,
soy yo, le contesté a la descarada
¿Que haces? pregunté preocupado,
¿De que loca historia has escapado?

¿Que dices? yo siempre, aquí he vivido
Jamás había visto un ser humano
de ti hablan los cuentos del tirano.
eres tu, quien mi mundo ha invadido.

-Tú eres leyenda, me lo han contado
eres la dama con cola de pescado.
-Pobre humano, estás equivocado,
en este mundo tú eres un malvado

-¿Pero que hacemos? no discutamos,
cuéntame de tu mundo de sirena
yo te hablaré, sentados en la arena
de los que sueñan, de los que amamos.

-Sobre unicornios y dragones narraré
te diré sobre los duendes y las hadas
del mar azul bajo las aguas congeladas
sobre jardines de corales te hablaré

Siento que alguien dejó abierto el portal,
donde se inspiran las sublimes poesías,
donde se mezclan las extrañas fantasías,
con las vivencias de este pobre ser mortal.

Espermatozoide


Nacen por millones, luchan y pelean por vivir, su vida es una gran carrera loca, constante, en pos de su destino, tienen que cumplir una misión, aunque no sepan de que se trata
Muchos llegarán hasta la meta, enorme como un Dios omnipotente, luego morirán porque es la meta, de todo ser que vive en el planeta.
Uno solamente morirá, en brazos de ese Dios que los guiaba, mas nunca sabrá que tras su muerte, sus restos se unirán a esa materia, esa que entre tantos de su especie, lo eligió para fundirse junto a él.
Jamás se enterará que tras su muerte, pasará a otra etapa de existencia, una nueva vida emprenderá, para seguir contra el viento y la marea, sin saber el porqué de su existencia.
Toda su vida luchará, tras un sueño, una meta, una quimera, que recién al final de su existencia, quizás pueda cumplir su cometido.
Igual que aquel ser tan pequeñito, el hombre luchará por existir, sabiendo que algo espera por delante, algo que jamás comprenderá.
Millones de seres morirán, tras haber completado sus anhelos, otros quedarán en el camino sin haber llegado a su vejez, mas uno, entre tantos millones, pasará a otro plano de existencia, solo que jamás se enterará, pues lo hará después de su muerte.
Todo aquel que muera simplemente, devolverá a la tierra con su cuerpo, todo aquello que de la tierra tomó, igual que aquellos seres diminutos que murieron sin haber sido los elegidos.

Aquel otoño



Era una tarde de otoño, salimos por el parque a caminar, los árboles al
vernos nos tejían, alfombras amarillas al pasar, dejamos a un costado los
cuadernos, charlábamos de cosas del momento, tus besos y el rubor de tus
mejillas, encendían mariposas en mi pecho.
Mirándonos tomados de las manos, pasábamos las horas que robamos, a alguna
clase de filosofía, forjando aquel amor de adolescentes.
Con poco nos sentíamos felices, la dicha consistía en la ilusión, deseos
reprimidos que por nuevos, apenas creímos conocer.
Yo intenté beber la copa con cariño, caricias que insinuaban casi un ruego,
tan tenues como brisa de verano, tus gestos ofrecieron resistencia.
Solo nos besamos y mimamos, corazones dibujados en cuadernos, poemas
inventados al instante y promesas que brotaban desde el alma.
Nunca supe que ha sido de tu vida, seguro hoy peines canas como yo, mas sé
que aquel otoño allá en el parque, con ternura, aún recordarás.

sábado, 6 de febrero de 2010

Cálido amor



Beso a beso lentamente
ambos descubren su piel
embriagándose con la miel
que les enturbia la mente

Inigualable emoción
sinfonía de sabores
calor, deseo y colores
embebidos de pasión

Se aceleran los latidos,
el corazón se desboca
arrecia un ansia loca
de deseos compartidos

Con avidez ambas bocas
sus caminos andarán,
y ambos intentarán
beber la miel que les toca

Ella pondrá en su boca
la ansiada y madura fruta,
él, libará en la gruta
que con su aroma provoca

El deseo crece y apura
mas ellos no tienen prisa
gemido, sollozo y risa,
es pasión, de la más pura

Con amor y con ternura
él cruza el umbral deseado
ella abraza a su enamorado
danzando en fugaz premura.

Cede el fuego y el calor
ellos mantienen la unión
la ternura y la comunión
hacen crecer el amor....

viernes, 5 de febrero de 2010

Aquel amor





El café que no tomaste, el beso que no te di
la lágrima en tu mejilla que pretendiste ocultar
tu voz musitó un adiós cuando te fuiste del bar
orgullo o cobardía, ¿Porque no te lo impedí?

Una página en mi vida, raída ya por los años,
una página de un libro que nunca debí editar,
un pasaje de mi vida que bien podía evitar
solo diciendo, te amo, sin mentiras, sin engaños.

Tu te marchaste esa tarde con una herida en el pecho
yo nunca me perdoné, por no evitar que te fueras
no me animé a ir tras de ti, mas quería que supieras
que al marcharte me dejaba con el corazón desecho

El tiempo pasa, me dije, y las heridas se cierran
ya vendrán otros amores para ocupar tu lugar
viví muchas historias, de amores sin conjugar
pero mis sienes, cenizas, a tu recuerdo se aferran

Desnudo





Escribí ya varias veces sobre el cielo y las estrellas
escribí sobre la arena, sobre el mar y sobre el viento
del aroma de las flores, de la rosa y sus espinas
y he escrito sobre los ojos y los labios de mi amada.

Escribí sobre el romance, el amor y sus matices
y he pintado los colores del dolor y los fracasos
he tratado de explicar los estados de mi alma
cuando estuve enamorado, cuando estuve acongojado

Sentí la necesidad de escribir de mis miserias
y plasmar sobre el papel mis sentimientos profundos
he plasmado mis creencias por el afán de escribir
o desatar ese nudo que me cierra la garganta

Hoy me pregunto por què he invertido tanto tiempo
si a la gente no le importa lo que sienten los demàs
he desnudado el alma y me he sentido indefenso
contra el ataque de aquellos que no sienten lo que siento.

Ayúdame

Ayúdame a creer que mañana serás mía,

ayúdame a sentir que el mañana es de los dos,

convénceme que me amas y que sientes lo que siento,

para poder enfrentar lo que me queda de vida.

Pintemos nuestro mañana con colores de ilusión,

ayúdame a creer que tu piel es mi destino

y que tu boca percibe lo que te brindan mis besos.

Hazme creer que la brisa que huele hoy a jazmines,

se asemeja a la promesa de un beso al sentir tu aliento,

que esos sueños que he tenido amaneciendo contigo,

son promesas del destino para un mañana unidos.

Oblígame a enamorarte un poco más cada día,

que nunca me sienta el dueño absoluto de tus sueños,

haz que no cese el querer adueñarme de tu boca

y que crezca esa sed loca que siento de poseerte.

Invéntame ese mañana para que sueñe contigo,

y no me deje caer en manos del desengaño,

necesito una ilusión para seguir respirando,

convénceme que me amas aunque sea una mentira,

para tener una excusa, para vivir día a día



Paso a paso




Ayer bebía los vientos a cada paso que daba,
derrochaba primaveras sin admirar sus esencias,
tomaba de los caminos lo que mi antojo deseara,
sin detenerme siquiera en observar su belleza.

Mirando hacia el horizonte, jamás percibía nada
se trataba solamente de descubrir el mañana
corría por los caminos sin mirar donde pisaba
y el tiempo, como sobraba lo utilicé en cosas vanas

Hoy respiro deleitándome con el aroma del aire,
quedo absorto admirando los detalles de la rosa,
me detengo a observar cada paso que da el tiempo
aderezando con sueños esta obra que es la vida.

El mañana es muy incierto, quizás no lo pueda ver,
tal vez me abrace la noche en un eterno silencio,
un día sin darme cuenta me dormiré en el camino
y la historia ya no tenga otro renglón para mí,

Quizás se tilden mis actos con insípida premura,
porque evito caminar por senderos que lastiman,
esa senda que me queda por delante transitar,
me he propuesto caminarla, sin apuro hasta el final.

viernes, 29 de enero de 2010

EMBRUJO





Llevo tatuado en mi piel
a fuego todos tus besos,
llevo de ti hasta en los huesos
tu esencia, sabor a miel

¿Como explicar lo que siento
cuando tu voz a mi oído
ronronea sin sentido
quemándome con tu aliento?

Si hasta parece que siento
cuando no estás a mi lado
tu aroma acaramelado
atraído por el viento

Mujer, me has embrujado,
me has atado con tu pelo
y voy como un lobo en celo
rondando por tu enrejado

No te aparto de mi mente
deseo tu seno ardiente
tu mirada transparente
tu pecho siempre turgente

Tan solo por disfrutar
bebí en tu adolescencia
la copa de tu inocencia
y me hiciste enamorar


martes, 26 de enero de 2010

Palabras




En esa esquina del tiempo donde se encuentra el silencio

con el arpegio más triste que le llaman soledad

se conjugan los recuerdos de los amores perdidos

con los momentos vividos de plena felicidad.

Las alegrías son gotas en el mar de la existencia

al igual que los dolores y momentos de ansiedad

a medida que los años nos causan nuevas heridas

otros cierran cicatrices y nos procuran la calma

Hay heridas que no cierran por mas que pasen los años

hay otras que van cerrando con el transcurso del tiempo

hay momentos de la vida que uno no quiere olvidar

mientras hay otros que nunca, uno quisiera recordar.

La esperanza es la balanza que nos permite seguir

cuando el puñal del destino nos lastima con crueldad

la fe, se convierte en soga para salir del abismo

y lograr de esa manera una nueva oportunidad.

Sin la fe y sin la esperanza, uno se aferra a sí mismo

se envuelve en ese silencio que llamamos soledad

el destino y el azar lo obliga a seguir viviendo

aunque por dentro su alma, le diga que ya está muerto